El pasado mes de marzo nuestro CEO Pablo Cuesta tuvo la oportunidad de escribir un artículo para la revista PV Magazine. En él, nos explica y reflexiona sobre los cambios en la generación y consumo eléctrico basados en la energía fotovoltaica y en el Real Decreto 15/2018.
El autoconsumo industrial
El Real Decreto 15/2018 elimina una serie de trabas legales que hasta ahora han dificultado la implantación del autoconsumo en nuestro país y abre una puerta al sector fotovoltaico, ya que como menciona en el título VI «La apuesta por una transición energética es indispensable y urgente.»
Este proceso de transición energética puede generar ciertas dudas en su implantación, pero se debe analizar desde una triple óptica de oportunidad en el sector industrial.
Por un lado, “el desarrollo de soluciones competitivas, innovadoras y viables tecnológicamente por parte de la industria de fabricación de componentes, ingenierías y empresas de instalación. El impacto del I+D y el posterior respaldo del mercado llevará a la consolidación de un ecosistema de proyectos y financiación”, afirma Pablo Cuesta.
En este sentido, los ambiciosos objetivos de añadir más renovables en el Mix Energético (Directiva europea de energías renovables y Plan nacional integrado de energía y clima) y la progresiva electrificación del transporte serán los dos de los vectores clave.
Por otro lado, “la construcción de miniplantas de generación eléctrica en las cubiertas de los edificios industriales permitirá el abastecimiento eléctrico de los mismos a precios muy competitivos, con plazos de amortización razonables que supondrán la reducción del gasto, sustituyéndolo por una inversión y propiedad de un activo de generación eléctrica”, explica nuestro CEO, Pablo Cuesta.
Por último, “el impacto social con la mejora de la balanza comercial a través de la reducción de las importaciones de combustibles (y con el incremento de la exportación de tecnología y soluciones made in Spain), la reducción de la contaminación y la minoración de los daños del cambio climático” sostiene Pablo Cuesta.
Estos tres puntos resumirían la oportunidad industrial actual de la energía solar fotovoltaica que, con los mecanismos y oportunidades existentes en el mercado, permite reducir la factura de la luz de nuestras empresas y familias, sin necesidad de subvenciones.
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